El 13 de abril de 2016 ha sido aprobada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad la primera Estrategia Nacional de Enfermedades Neurodegenerativas en España.

El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y los consejeros de Sanidad de las comunidades autónomas han aprobado el 13 de abril la primera Estrategia de Enfermedades Neurodegenerativas del Sistema Nacional de Salud, que tiene como principales líneas de actuación mejorar el diagnóstico, dar atención personalizada a los pacientes y establecer programas que faciliten el respiro de quienes cuidan de las personas afectadas.
Ha sido en el Pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud celebrado con los consejeros de Sanidad de todas las comunidades autónomas.

La primera línea de la estrategia se refiere a la prevención de la enfermedad y a la mejora del diagnóstico precoz, para lo que establece que hay que elaborar procesos de derivación a atención hospitalaria desde los centros de salud y programas de seguimiento para personas de alto riesgo genético.

En segundo lugar, el documento trata la atención a las personas con estas enfermedades y determina que las Comunidades Autónomas elaboren planes que integren la atención social y la sanitaria. De hecho, por primera vez, han participado representantes de las CC AA tanto de las consejerías con competencias en Sanidad, como aquellas con competencia en Servicios Sociales.  Aquí se contempla también hacer un plan individualizado de atención a cada paciente y tener en cuenta el riesgo social.

Por otro lado, esta estrategia acordada con las comunidades hace especial énfasis en las personas cuidadoras y establece programas de respiro para facilitar su descanso y programas de apoyo emocional, como acciones formativas de autocuidado (manejo del estrés, relajación, etc.).

Otras líneas estratégicas abordadas por el documento son la sensibilización sobre las enfermedades neurodegenerativas para aminorar el estigma, la formación de profesionales y el fomento de la investigación en líneas como estudios epidemiológicos, factores de riesgo, nuevas terapias farmacológicas o tratamientos no-farmacológicos.

Desde la Neuroalianza, se considera la aprobación de esta Estrategia una muy buena noticia, ya que supone un primer paso en las mejoras que son necesarias abordar en relación a este tipo de enfermedades. Las organizaciones miembro de la Neuroalianza han participado en el desarrollo de esta Estrategia, la cual ha supuesto un arduo trabajo que se ha realizado con la colaboración de todos los agentes implicados. Ahora toca seguir trabajando para que la Estrategia aprobada se haga realidad; para ello, va a ser fundamental tanto el trabajo de las CCAA como el abordaje de las especificidades de las distintas enfermedades.